Lamentaremos no habernos ido más temprano algún día,
no dejar crecer y luego intentar cuidar lo que no nos pertenecía,
nos arrepentiremos de pasar por alto todas las voces, todas las situaciones, todo lo demás...
Seremos culpables de reconocer que somos humanos y que seguimos atrapados en este cuerpo infiel,
que se distrae con cada ruido que pasa,
dejando en descuido todo lo que esta bella naturaleza nos puede ofrecer.
Sostenemos el amor de tantas formas,
que es casi imposible definir alguna ya,
solo queda confiar en los demás,
y los retoños de maldad se olvidan, apenas los veas asomar.
Con cada soplido, con cada batido de las hojas suspendidas no lo sé, pero me has visto,
y las ya marchitas se desplazan intentando recordarte que aún existo,
que aún existe naturaleza que apreciar,
una que hipnotiza los sentidos,
y es ahí cuando queda colgada esa vida, aquella vida, o al menos eso pensábamos, que era vida.. y entonces renacemos para volver a empezar y pisar adecuadamente esta vez.
Ves la diferencia,
sientes el temor,
amas otra vez,
y te corresponden ese amor.
J. Amparo
24-jul-2013
